domingo, 27 de abril de 2008

Simpáticas seguiriyas

Siempre por los rincones
te encuentro llorando :
que yo no tenga libertad en la vida
si te doy mal pago .

¡ Qué desgracia tengo
madre , hasta en el andar !
¡ Cómo los pasos que yo doy pa`lante
se vuelven pa`tras !

No tengo yo puerta
a donde llamar :
yo no tenía ná má que la tuya . . .
. . la encuentro cerrá .

Cuando pienso y me veo
lo sólo que estoy
no sé cómo no cojo un cuchillo
y la muerte me doy .

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